Se nos fue el Festival de Blues

Así es:

Fue un fin de semana lleno de Blues, por un lado Botafogo y su show en el Backstage y por otro el Festival Al Sur del Blues. Desperté el domingo en la mañana con ese sabor a dulce que me dejó el festival. Tanto por mis logros como por los logros de los bluseros.

El puntapié inicial lo dio un gran amigo y una persona de esas que merecen monumentos. Es que Gonzalo Taborga es todo un personaje que reune las características más buenas que una persona puede tener. El Alma del Blues era el título de su clínica y que mejor nombre escogió. Estaba muy nervioso y de paso me contagio su nerviosismo, pero se notó su experiencia y manejo del público.

Comenzó con frases que aún no comparto, como por ejemplo, que es un músico frustrado y cosas parecidas. Eso es una gran mentira pues hemos pasado un par de tardes tocando armónica y lo hizo bastante bien. Bueno, respecto a la clínica, creo que todo el que asistió se emocionó con sus palabras, con el ritmo y matices que les dió a cada una de las oraciones que nos dijo y que nos hizo pensar y sentir. La bofetada sutil que nos pegó cuando nos hizo ver que muchos de nosotros hacemos más rock que blues fue uno de los puntos más tensos de la clínica. "No será que el Blues se toca con la mano derecha( la rítmica), y no con la izquierda?". Creo que esa frase nos marcó a todos. Yo defino a la clínica de Gonzalo como una clase magistral de blues y por la forma en la que nos contó todo, como un "Solo de Blues", pues reunió todos los conceptos de un buen solo en todas las palabras y frases que nos regaló. Sin duda, el festival comenzó de la mejor forma posible y los aplausos y laureles que recibió mi amigo Gonzalo fueron tan sinceros como las felicitaciones personales que cada uno le dió después. Lo que continuó no lo comento pues no me pude quedar a disfrutar de las bandas de esa noche aunque con todo lo vivido en la clínica quedé más que satisfecho.

El viernes fue de locos, con pega todo el día y corriendo para llegar a probar sonido. La prueba fue un éxito y quedamos muy conformes con el sonido que íbamos a entregar. Las horas previas a la tocata fueron como siempre han sido: llenas de alegría, ron, cerveza, tallas divertidas y un mar de risas que contagiaban hasta al más serio. Llegó nuestro turno luego de una de las típicas presentaciones impecables de Araya y Gumucio, en la que la sorpresa y show escénico fue la tónica, obviamente junto a su gran talento.

La intro que hizo Alejandra Rocca nos llenó de más energía y nos hizo mostrar nuestro trabajo desde el alma, como debe ser el blues y el rockablues. Los temas antiguos fueron nuestro pilar y los nuevos fueron nuestros juguetitos con los cuales armamos mucha empatía con el público. Hasta nos pidieron un tema más. Cuando nos bajamos pudimos notar y sentir que esta vez ERAN FELICITACIONES SINCERAS y con razón ya que nuestro repertorio se basó en temas nuestros.

Luego Los Queltehues mostraron su Blues y la rompieron con su Blumbia, además de las letras que eran demasiado divertidas, interesantes y "bluseadas". En resumen, un Viernes con sabor a Domingo.
El sábado fue la clínica de armónicas y los nervios aumentaban a medida que se acercaba la hora. Y es que cuando debes hablar de tus experiencias te queda la duda de qué tan interesante pueda ser para los oyentes. Afortunadamente estaba compartiendo la clínica con una gran persona como es Javier Diabluz Argomedo y con el cual, además de tener en común el gusto y pasión por la Armónica, hemos realizado algunos viajes conociendo a los mismos Harp Players.

La clínica fue un éxito por todos lados: la gente disfrutó mucho, se rió bastante, aplaudió en demasía y pudimos mostrar 4 estilos distintos de tocar armónica cuando invitamos al escenario a Victor Lastra y Claudio Valenzuela. Ese fue el momento más alto de la clínica.

Y fue así como terminó y nos llovieron los aplausos y las felicitaciones y los interesados en tomar clases de armónica. En fin, cumplimos con "Compartir el conocimiento" con el público.

Luego de todo esto, comenzó la última noche en la cual estaba la leyenda del Blues en Chile, Bernie y Sea And Sun. Con un sonido un poco distorsionado igual llegaron a la gente ya que era escuchar blues desde la fuente misma. Por motivos de ubicación no pudimos entrar a ver a la Vintage y nos quedamos hablando con Bernie. Creo que escuchar blues moderno y conversar con un veterano del blues fue un matiz importante. Es que Bernard sabe mucho pues vivió mucho y tiene frases para el bronce como "El blues se siente en el pecho .....o más abajo". Creo que aprendí mucho en esos 40 minutos. El final de finales lo trajeron los Bluseros Muertos que nos dieron a todos una lección de cómo llevar un show y cómo llegar al público. Muy versátiles y talentosos músicos.

La jam final fue sólo un trámite en el que compartimos un rato de blues divertido.

En fin, todo muy bueno. Las clínicas excelentes, las bandas cada vez mejor, el público cada vez más atento, la organización cada vez más organizada(jeje). Todo mejorando. Solo debo agradecer a mi polola por todo el apoyo y amor que me da, a Fernando y Jaime por creer en nosotros y por mantener la escencia del Festival, al sonidista por dejar sonando mi harp filete y por el apoyo en la clínica, a Gonzalo Taborga y Andreita por su sinceridad y amistad, a Bernie por compartir sus vivencias y opiniones y a la Porota Blues por las fotos. Nos vemos en el festival de Talagantito.